7.- Disfruta

Haz lo que te gusta sólo porque te gusta

Me encanta el flamenco. De siempre. 

Y no sé de dónde me viene, porque en mi casa nunca se escuchó, ni se bailó, ni mucho menos se tocó. Pero a mí me eriza la piel. En cuanto se arma un jaleo, ahí estoy yo, intentando seguir el compás. Mal. Porque soy nula en cuanto a música se refiere. Por eso me he apuntado a una academia.  Después de un montón de años queriendo bailar, al final me he despojado de todas mis vergüenzas y estoy bailando.No porque a estas alturas quiera convertirme en profesional... Sólo lo hago porque me gusta. Me hace feliz.

Mafalda again

Pero, ¿tiene cabida en el mundo actual hacer algo que "no sirva para nada"? Nuestra sociedad, la sociedad del no perder un minuto, de aprende inglés, ve al gimnasio, ten un huerto, trabaja duro, respira aire puro, ten criaturas, produce, fórmate, trabaja más... (¡uf!) considera inconcebible la idea de invertir el tiempo en hacer algo no-productivo, algo que no te lleve a ningún lado, que no sirva para generar más. 

FLOW

Flow es un concepto que acuñó la psicología positiva para designar el estado mental que una persona tiene cuando se encuentra absorta en una tarea.  Es lo que definimos comúnmente como "se me ha pasado el tiempo volando". Si se pasa el tiempo volando es porque lo que estás haciendo te gusta, por un lado, pero también te desafía, y, al precisar grandes dosis de concentración, estás aquí y ahora, no pensando en lo que vas a hacer luego o lo que te pasó ayer. Esta experiencia de fluir nos hace sentir más felices, más competentes y nos fortalece.

¿Cómo aumento mi flow?

Piensa qué tareas te hacen tener esa sensación, ¡y emplea más tiempo en ellas!

Si no es el caso, sino te ocurre con nada de lo que hagas, la psicología puede ayudarte a encontrarlas y es que estas tareas tienen ciertas características que son las que hacen que tengamos esa conciencia plena.

Tienen que gustarnos, evidentemente, pero también motivarnos, hasta el punto que la realización en sí sea más importante que la meta. Además, tiene que tener un grado de dificultad medio, esto es, que no nos resulte tan rutinaria como para aburrirnos ni tan difícil como para estresarnos, así la concentración se mantendrá en un estado óptimo y el desempeño será alto. Porque esto último también es importante, y es que tiene que ser algo en lo que te sientas competente, con habilidad, que puedas y sepas hacerlo.

Resumiendo, haciendo cosas que te gustan, te motivan y te desafían (sabiendo que tienes capacidad para resolverlas) podrás alinear tus emociones y pensamientos e ir todo a una, con lo que entrarás en un estado de flow, de bienestar, que, seguro, aumentará tu felicidad.